Quizá ya has escuchado sobre el descubrimiento de un agujero negro en la vía láctea al que nombraron Sagitario A*, porque ha sido tendencia desde que el 12 de mayo se dieron a conocer sus primeras imágenes, mediante una conferencia de prensa simultánea en diferentes países. Pero ¿sabías que científicos de la UNAM participaron en su descubrimiento? ¡Te contamos todo!
Una de las imágenes más esperadas por la comunidad científica era la del agujero negro conocido como Sagitario A*, que se ubica a 27 mil años luz en nuestra propia galaxia. Desde el año 2019, los astrónomos lograron capturar la primera imagen de este agujero negro, mediante el uso del Telescopio de Horizonte de Eventos (EHT por sus siglas en inglés).
De hecho, ¡fue necesario que participaran más de 400 científicos! Esto significó una colaboración internacional, pues el EHT se conformó por ocho observatorios distribuidos en diferentes partes del mundo. Entre las que se encuentran Estados Unidos, Chile, la Antártida, España y México.
Participación de investigadores de la UNAM
México también puso su granito de arena, la máxima casa de estudios participó a través del investigador Laurent Raymond Loinard, del Instituto de Radioastronomía y Astrofísica (IRyA); y la investigadora Gisela Ortiz León, del Instituto de Astronomía (IA). Con su participación, se puso en alto el nombre del país entre los colaboradores.
Su colaboración fue a través del Gran Telescopio Milimétrico (GTM) Alfonso Serrano, que se ubica en el volcán Sierra Negra de Puebla.
No obstante, es necesario resaltar que esta unión de científicos no fue tan sencilla; ya que para obtener un registro fiel del comportamiento del agujero negro, las y los expertos se coordinaban para obtener al mismo tiempo, registros de Sagitario A* en diferentes ángulos.
Pero, ¿qué es un agujero negro?
Si ya pensaste “¡Hey! Más despacio cerebrito”, acá te explicamos qué es un agujero negro. De acuerdo con la NASA, un agujero negro es “un objeto astronómico con una fuerza gravitatoria tan fuerte que nada, ni siquiera la luz, puede escapar de él.”
Además, para evadir el límite de la «superficie» de un agujero negro, que es denominada “horizonte de eventos”, se requiere de una velocidad mayor a la velocidad de la luz; pero exceder esa medida es imposible pues la velocidad de luz es el límite que puede alcanzarse en el cosmos.