El David y La Piedad esculturas del famoso artista italiano Miguel Ángel Buonarroti, llegaron a la Ciudad de México con certificación del vaticano, para que puedas visitarla cualquier día de la semana en el Museo Soumaya, aprovechando que sólo hay 3 de estas en todo el mundo.
Listas para ser visitadas desde el 07 de enero, las esculturas, al tratarse de copias certificadas, tienen las dimensiones idénticas a las de la original.
Además, se espera que estas esculturas se convierta en parte del acervo permanente del museo ubicado en la avenida Miguel de Cervantes, al poniente de la CDMX.
Sobre la exposición
Una vez que estés frente al espejismo que representa el Museo Soumaya, no te dejes intimidar por la fila pues avanza más rápido que el Rayo McQueen.
Y ya antes de la puerta estarás frente famosas esculturas como El pensador, una figura de bronces de Auguste Rodin creada cerca del 1881 para acompañar La Puerta del Infierno, que te espera pasando el recibidor.
Fotografía: Aura Pérez
Sin tener que caminar mucho, en la Planta Baja ya encontraras las esculturas de Miguel Ángel que podrás observar a centímetros de distancia.
Y en el caso del David, sin restricciones, para poder rodearlo con detenimiento sin ninguna limitante.
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Fotografía: Aura Pérez
Y si bien el propio artista del Renacimiento, Giorgio Vasari dijo alguna vez que:
“Cualquiera que haya visto al David no tiene necesidad de ver otra cosa de ningún otro escultor vivo o muerto”
Tú no te contengas para recorrer La Piedad y La Puerta del Infierno, que están a los lados de la pieza central.
Las obras en cuestión se tratan de una réplica certificada, cómo lo son sólo otras 2 que se encuentran exclusivamente en Florencia (en la Piazza della Signora y la Piazzale Michelangelo).
Todas realizadas por artistas florentinos de la Galería Bazzanti, con mármol de Carrara: el mismo con el que trabajo Miguel Ángel.
Sobre las esculturas
El David es una de las obras maestras del Renacimiento según la mayoría de los historiadores, y una de las esculturas más famosas del mundo.
De mármol blanco, con una altura de 5,17 metros y 5572 kilogramos de masa, fue realizada por Miguel Ángel Buonarroti entre 1501 y 1504 por encargo de la Opera del Duomo de la catedral de Santa María del Fiore de Florencia.
La escultura representa al rey David bíblico en el momento previo a enfrentarse con Goliat.
Y fue acogida como un símbolo de la República de Florencia frente a la hegemonía de sus derrocados dirigentes, los Médici, y la amenaza de los estados adyacentes, especialmente los Estados Pontificios.
La Piedad del Vaticano o Pietà es un grupo escultórico en mármol realizado por Miguel Ángel entre 1498 y 1499.
Con unas dimensiones de 1,74 por 1,95 m, que sólo se encuentra en la Ciudad del Vaticano.
Esta obra es de bulto redondo, lo que significa que se puede ver desde todos los ángulos, pero el punto de vista preferente es el frontal.
Y es algo que puedes experimentar en esta ocasión, pues no hay restricciones para rodearla.
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Se trata de la Virgen María, que sostiene a un Cristo muerto y que, intencionadamente, aparenta mayor edad que la madre.
En una composición triangular sosegada, se muestra el dolor de una madre al ver a su hijo muerto en sus brazos.
Fue encargada por el cardenal Jean Bilhères de Lagraulas, embajador del monarca francés ante la Santa Sede, al que el autor conoció en Roma.
Fotografía: Aura Pérez