Luego de recibir la calificación de un examen o trabajo, independientemente del resultado, ¿llegaste a pensar que algún comentario de retroalimentación sería más útil para mejorar tus resultados en evaluaciones futuras?
Pues de acuerdo con Turnitin, una empresa tecnológica que ofrece soluciones y herramientas para detectar la similitud de textos , una investigación hecha en 1958 por el psicólogo educativo Ellis Page; reveló que los y las estudiantes que solo reciben calificaciones no tiene mejoras en su rendimiento académico; contrario a lo que sucede cuando a las evaluaciones se agregan comentarios personalizados.
En ese sentido, Catalina Londoño, gerente de Servicios Profesionales y Educativos de la citada empresa, en entrevista para Generación Universitaria, apuntó que la retroalimentación es una herramienta de formación que puede ayudar a mejorar el ciclo de aprendizaje y por ende, a corregir errores de manera oportuna; además de que la tecnología contribuye a que el proceso sea eficiente.
“La retroalimentación entendida como esa información que yo le estoy dando al estudiante: en dónde está y hacia dónde tienen que ir, hacia dónde queremos que vaya. […] tú puedes hacer la retroalimentación a un estudiante de manera presencial o la puedes sistematizar, hacerla más sencilla, más fácil, efectiva a través de tecnología […] que le hace la vida más fácil a los profesores y a los estudiantes”.
La tecnología en el proceso de retroalimentación
Pero ¿cómo se pueden emplear las herramientas tecnológicas en el proceso de retroalimentación? Aunque Londoño explicó que los softwares facilitan a los docentes el proceso de evaluación, revisión y calificación para cualquier texto o documento; hizo énfasis en uno relacionado con la integridad y la identificación de similitudes en los escritos.
Por ejemplo, cuando escribimos un texto sin atribuir las ideas de manera correcta a la persona de quien las tomamos, cometemos plagio. Y no solo nos arriesgamos a ser expulsados de la institución en la que estudiamos; sino también a enfrentar problemas legales. No obstante, es una situación que podría prevenirse al realizar comentarios mientras el trabajo está en desarrollo, incluso, desde antes.
Para Catalina Londoño, es un asunto de formación. Por ello es importante que desde los primeros años escolares se muestra a los estudiantes “la importancia de dar crédito a los autores de las ideas […], de ahí en adelante, en todos los momentos de formación hay que hacer énfasis en esa manera correcta de hacer las cosas, en esa importancia de la integridad académica cuando se escribe”.
Foto: Cortesía Turnitin
Asimismo, agregó que con estos softwares, tanto docentes como estudiantes pueden dar seguimiento al proceso de aprendizaje; ya que queda el registro digital, de los comentarios que los profesores hicieron a cada entrega de los alumnos. Quienes aplican en sus siguientes trabajos lo que adquirieron con la retroalimentación.
Cuatro puntos para una retroalimentación efectiva
La gerente de Servicios Profesionales y Educativos de Turnitin, también dijo que la retroalimentación debe ser justa, precisa, específica y oportuna. El primer punto se refiere a que no se hacen distinciones en las evaluaciones “estamos estandarizando de cierta manera a todos los estudiantes, perciben esa justicia y transparencia en la manera en cómo estás calificando y haciendo retroalimentación”.
Es precisa porque se indica a las y los estudiantes, el lugar preciso del texto o documento donde se requieren modificaciones o en el que es necesario prestar atención. También es específica pues se puede personalizar y ajustar, acorde a sus necesidades.
Además, es oportuna porque se da en el momento en que las y los estudiantes la van a usar, es decir, durante la realización de sus documentos, más no al final.
Si te interesa, aquí puedes encontrar más información sobre los software de Turnitin, acerca de procesos de aprendizaje, y más.
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